Por: Rvdo. Edgardo M. Caraballo Marín
lunes, 30 de diciembre de 2024
«Una voz clama: En el desierto preparad camino al SEÑOR; enderezad calzada en la soledad a nuestro Dios». Isaías 40:3 (NVI)
La Navidad es el recordatorio vibrante de que Jesús ha nacido, trayendo consigo la
salvación que toda la humanidad necesita. Es la proclamación de la esperanza, la
paz, el gozo y la gracia de Dios, que se han hecho tangibles para todos nosotros.
En esta temporada, la invitación no solo es a recordar ese acontecimiento,
sino también a reflexionar sobre la respuesta que damos como Iglesia ante el llamado
de Dios.
Isaías nos insta a preparar el camino al Señor, a enderezar las sendas y allanar el
camino para que el pueblo pueda ver a Dios. Este mensaje, dado en tiempos de
desolación, sigue siendo tan relevante hoy como lo fue en aquel entonces. ¿Qué
camino estamos preparando en este año que estamos por concluir? ¿Hemos hecho lo
necesario para que la salvación que celebramos llegue a las vidas de las personas que
nos rodean?
Es momento de evaluar lo que hemos logrado como Iglesias Bautistas de Puerto Rico:
los proyectos realizados, las metas alcanzadas y, lo más importante, cómo hemos
impactado a nuestras comunidades. ¿Hemos sido verdaderamente el refugio y la
esperanza que necesitan? ¿Hemos llevado gozo, paz, amor y esperanza en medio de
este tiempo? ¿Hemos sido testimonio fidedigno para que el verdadero significado de la
Navidad llegue a las comunidades donde servimos?
La Navidad no debe quedarse dentro de nuestras cuatro paredes. Debe salir a las
calles, a los hogares, a los corazones. Como Iglesias Bautistas de Puerto Rico,
tenemos el mensaje de la verdadera Navidad: es Dios con nosotros, el Salvador que ha
venido a transformar el sufrimiento en gozo, la tristeza en paz y la desesperanza en
esperanza. Es hora de preparar el camino para Él, de enderezar las sendas con la
buena noticia de su amor y salvación.
Que este tiempo navideño no se quede solo en nuestros cultos, sino que se haga
visible en nuestras acciones. Que la luz de Cristo ilumine cada rincón de nuestras
comunidades, transformando vidas y llevando la verdadera alegría del nacimiento del
Salvador. ¡El Rey de Reyes ha llegado, y con Él, esperanza, gozo, paz y amor! Este es
el tiempo para hacer visible la luz de Cristo en nuestro entorno, ser un reflejo de su
amor y mostrar que la verdadera esperanza solo se encuentra en Él.
Aceptemos el desafío del profeta, salgamos y encontremos a la gente en el camino.
Enderecemos la calzada y caminemos juntos mostrándoles que la salvación ha llegado.
¡Ese es el verdadero camino que nos espera!
El Rvdo. Edgardo Caraballo Marín es ministro ordenado de las Iglesias Bautistas de
Puerto Rico, es el actual ministro ejecutivo de nuestra denominacion. Posee una
maestría en divinidad del Seminario Evangélico de Puerto Rico.
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